Ismael García C.
Quien ejerce el magisterio estimula y acepta la autonomía y la
iniciativa de los estudiantes, para que interrelacionen ideas y conceptos, se
planteen problemas y busquen soluciones. Hace preguntas abiertas, complejas e
inteligentes que retan a los alumnos a hacerse preguntas, a buscar respuestas,
a profundizar.
Planea sus clases en torno a grandes temas que vinculan los contenidos
curriculares, proponen la resolución de problemas relevantes para los alumnos y
buscan que elaboren sus respuestas iniciales, las cuales los estimulan a
estructurar y reconceptualizar.
Utiliza recursos diversos e interactivos, datos y fuentes primarias.
Presenta a los alumnos posibilidades reales y les lleva a generar abstracciones
hacia un aprendizaje significativo.
Es flexible en el diseño de la clase, permite que los intereses y las
respuestas de los alumnos orienten el rumbo de las sesiones, las estrategias de
enseñanza y el contenido. Aprovecha la mayor receptividad de los alumnos ante
algunos temas y profundiza.
Verifica que sus alumnos comprendan los conceptos antes de compartirles
su propia comprensión de los mismos. Procura que efectúen procesos de
pensamiento propio.
Estimula a los alumnos a dialogar con el colectivo posibilitando el
aprendizaje colaborativo y la construcción de significados, valorando y
utilizando el pensamiento crítico.
Plantea actividades que retan cognitivamente a los alumnos, los
involucran en experiencias que pueden contradecir sus hipótesis iniciales y
luego estimula la discusión. Los alumnos aprenden de sus propios errores y
reformulan sus perspectivas.
Provee tiempo para que los estudiantes piensen, respondan preguntas, construyan hipótesis y las comprueben, relacionen y creen metáforas.
Utiliza terminología cognitiva precisa que oriente la actividad de
aprendizaje: “identifica”, "clasifica", "analiza",
"crea", entre otras y evalúa el aprendizaje en el contexto diario.
Pese al agobio de trabajo y a las dificultades personales, quien ejerce
el magisterio crea una atmósfera ética de aprecio positivo, de convivencia
armoniosa, que inspira confianza en los alumnos, a quienes escucha y los
estimula a investigar, a construir aprendizaje, y no sólo a seguirlo a él,
media entre el alumno, protagonista del aprendizaje, y el ambiente.
……………………
Jorge Ismael García Corleto es
escritor, presidente de la Asociación GATO para las Artes y la Cultura,
licenciado en Psicología, licenciado en Educación, master en Educación
Superior; y egresado de doctorado en educación, trabaja en la docencia en el
Centro Escolar INSA y en la Facultad Multidisciplinaria de Occidente de la
Universidad de El Salvador, en Santa Ana.
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